Algunos ya la conocerán por los álbumes de fotos de Facebook… Una de mis grandes pasiones, hobbies o como lo queráis llamar, desde bien pequeño, es el modelismo ferroviario. A unos les da por la Fórmula Uno, a otros por el motociclismo y a algunos nos apasionan los trenes y la construcción de maquetas ferroviarias. En el mundo existen millones de aficionados dispuestos a gastarse el dinero necesario para llegar a fabricar maquetas dignas de concurso, que pueden oscilar entre los 2.000 y los 10.000 euros, el límite no existe, lo fija cada aficionado.
Existen cientos de webs -dedicadas a debates sobre el tema y subida de fotografías de trenes del mundo en plena circulación- y clubs dedicados a esta cara afición. En mi ordenador debo tener casi 1.000 fotos al respecto. Incluso se celebran mercadillos de compra-venta y quedadas a nivel internacional para exponer material o intercambiarlo… La llegada de la informática y el mundo digital al modelismo ferroviario, ha llevado al infinito las posibilidades de diversión, pudiendo mediante un sistema informático controlar la circulación de varios trenes a la vez sin ningún problema.
Muchos preferiríamos viajar en tren antes que en coche, el problema en España es que tenemos una oferta ferroviaria penosa y nada competitiva. Se suelen organizar viajes en tren por el mero hecho de viajar en ellos e incluso algunas asociaciones (como la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid), poseen unidades antiguas ya retiradas de la circulación, destinadas a su restauración y disfrute. El AVE, único tren que podría competir con el coche o el avión, es demasiado caro para todos los bolsillos y la gestión por parte de Adif-Renfe de los trenes de Cercanías, Regionales y Media Distancia es penosa, sin contar con las condiciones laborales de los maquinistas, que es peor aún… Aún recuerdo el primer tren que me regaló mi padre con apenas 7 u 8 años. Me podía pasar horas enteras jugando por aquel entonces. Cuando eres adulto y consigues continuar con la afición, el juego se convierte en admiración y en coleccionar todo lo que puedes (muchas veces por encima de tus posibilidades). La última maqueta ferroviaria que tuve, me costó alrededor de 4.000 euros, dinero que sigo pagando actualmente. Un tren medianamente bueno, de buena marca y formados por 3 vagones puede costar 200 euros o más. Debido a mi última mudanza, con una gran pena tuve que deshacerme de ella, vendiendo todo el material que tenía, ya que me era físicamente imposible tenerla bajo techo. Aunque actualmente no pueda disfrutar de esta afición, sigo estando al día gracias a los foros y webs de coleccionistas. Una maqueta medianamente buena, necesita una habitación entera, debido a su extensión, aunque pueden tener mil y una formas e incluso distintos niveles. Os dejo algunas de las fotos de la maqueta que hecho tanto de menos y espero poder volver a construir algún día, si me toca una lotería o algo, claro…
Euromed entrando en un túnel, uno de mis favoritos para viajar.
ICE 3 de la alta velocidad alemana.
Suizas, primeros trenes de Cercanías que tuvo Renfe entre los años 60 y 80. Llamadas así por su antigua fabricación en aquel país.
Tren Estrella, Talgo 200, Talgo III (ya desaparecido), Cercanías y Locomotora serie 319 destinada para Mercancías.
Foto anterior, vista desde el lado opuesto.
Locomotora "Altaria" y automotor destinado a Regionales.
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